sabemos lo que estás pensando: «¿Mi perro necesita levantar pesas como el de la foto?». La respuesta corta es no (¡menos mal!). Pero la respuesta larga es que, en Argentina, el 60% de las mascotas tienen sobrepeso debido a la vida sedentaria en departamentos.
Un perro cansado es un perro feliz (y uno que no rompe el sillón). El ejercicio no solo quema calorías, sino que reduce la ansiedad. No hace falta correr una maratón; una caminata de 30 minutos permitiéndole olfatear (su «red social» natural) cansa más que 1 hora de correr sin sentido.
¿El desafío de la semana? Cambiá la ruta del paseo. Los olores nuevos estimulan su cerebro. Y si llueve, jugá a las escondidas con premios dentro de casa. La salud física es vital, pero la salud mental es lo que fortalece el vínculo con vos.
No importa qué tan lento vayas en el paseo, siempre estarás venciendo al que se quedó tirado en el sofá. Tu perro es tu mejor personal trainer.

Más movimiento = Más Riesgo (y cómo prevenirlo)
Ojo al dato:
Los perros más activos y paseanderos son los que tienen mayor riesgo de extraviarse o asustarse con un ruido en la plaza.
No dejes que el miedo te frene. Salí a disfrutar, pero hacelo con responsabilidad.
Identificación: Asegurate de que lleve su QR Pets visible en el collar. Si sale corriendo, quien lo encuentre podrá llamarte en segundos.
Historial Médico: Usá tu perfil digital para anotar su peso mes a mes. Es la mejor forma de ver si el ejercicio está funcionando y mostrárselo a tu veterinario en la próxima visita.
¿Listo para salir? Correa, bolsita y ¡a disfrutar de la manada!
